¡Sweet 17!

¿Recuerdas qué hacías un 23 de septiembre de 1991?, lo más seguro es que no, pero no te preocupes, así como tú, habrá muchas personas que también lo ignoren y, seguramente te preguntarás por qué habrías de recordar lo acontecido en esa fecha.
Para ayudarte a encontrar la respuesta a esa pregunta, harás un ejercicio. Piensa que tienes 17 años de edad, etapa donde normalmente cursas el bachillerato, tus intereses, sin generalizar, probablemente eran las fiestas con los amigos, las novias (os), la música, los antros de moda, el alcohol, el cigarro, manejar el auto de papá, entre otras actividades.
Aunque hay un ligero inconveniente, aún no eres mayor de edad. En México se adquiere al cumplir los 18 años, mientras que en Estados Unidos la cifra aumenta hasta los 21, por lo que algunos jóvenes de ambos países dan rienda suelta a sus inquietudes antes de convertirse en “ciudadanos”, en cambio, otros se desarrollan de forma paralela mediante alguna actividad de esparcimiento o deportiva para alejarse de algunos vicios como el alcoholismo y la drogadicción.
Tal es el caso de la estadounidense Melanie Oudin, quien nació en Marietta, Georgia en la fecha antes mencionada. Esta joven tiene una hermana gemela, Katherine, que acude a la escuela como normalmente hacen los chicos, a comparación de Melanie, que toma clases particulares en casa para tener tiempo de practicar tenis.
Esta jovencita de apenas 1.68 metros de estatura y 59 kilogramos de peso ha sido la grata revelación del último Grand Slam del año, el US Open, que se está disputando en Nueva York. En lo que va de su participación en este torneo ha despachado a dos favoritas para llevarse el título, a las rusas Elena Dementieva y María Sharapova, en segunda y cuarta ronda respectivamente.
Oudin es una tenista joven, aguerrida, que no da por perdida una bola tan fácilmente. Como dato sobresaliente, en el circuito juvenil llegó a ganar 5 campeonatos de manera consecutiva, por lo que se ha ido convirtiendo en una gran promesa para el tenis estadounidense, el cual está urgido de estrellas, de no ser por las hermanas Williams, Serena y Venus, no se hablaría de los Estados Unidos dentro del deporte blanco.
La edad no es significado de inmadurez tenística, y eso es lo que demostró la noche del sábado Oudin tras eliminar a Sharapova, quien ganó Wimbledon en 2004 casualmente con 17 años de edad, después de haber perdido el primer set para dejar los parciales 3-6, 6-4 y 7-5. Ojalá esta chica (Oudin) se llene de la inspiración de Mónica Seles en 1990 o de Martina Hingis en 1997 cuando estuvo a punto de completar el Grand Slam, a falta de conquistar Roland Garros.
¿Saben cuál es la coincidencia entre Seles y Hingis cuando ganaron esos torneos?... la edad, así es, Mónica tenía 17 años y Martina maravilló al mundo tan sólo con 16 añitos, así es que Oudin tiene la historia y el público a su favor para escribir la propia y entrar al libro de récords del US Open.

El Negro Trani

A callar bocas

México y Costa Rica invirtieron posiciones, ahora los ticos se ubican en zona de repechaje y los aztecas tendrían pase directo al Mundial

México ya se encuentra en zona de clasificación directa al Mundial 2010 tras haber vencido 3-0 a Costa Rica en territorio centro americano. A ver si con esta demostración más, los ticos se dignan a enterrar el "aztecazo", porque esa buena suerte que tuvieron en aquél momento, parece que hoy fuera un karma con el que tienen que cargar cada vez que se enfrentan con los mexicanos.
Ese capítulo en la historia de la Selección sí fue una sorpresa y, no lo que sucedió anoche en el estadio Ricardo Saprissa.
Basta con recordar lo acontecido en el estadio Azteca en marzo pasado, se le ganó al equipo entrenado por Rodrigo Kenton, pero nuevamente la prensa costarricense insistía en recordar la primera derrota en la historia del cuadro azteca en casa durante una eliminatoria mundialista.
A pesar de que el Tri pasaba por uno de sus peores momentos en la clasificación, se trajo un técnico improvisado como el sueco Sven Goran Eriksson, quien nunca se identificó con la afición ni presentó un estilo de juego definido y, lo que es más grave, nunca repitió una alineación titular, aún así, el combinado nacional demostró que Costa Rica es cliente y lo derrotó sin problemas 2-0. Sin embargo, días antes al cotejo de ayer, en efecto, adivinaron, todavía algunos ticos pecaron de osados y aseguraban la derrota mexicana. Si alguna vez pudieron hacerlo en el Azteca, porque no habrían de repetirlo en casa, ¡pa’ la sorpresita que se llevaron!
Quizá Kenton desconocía las características de sus rivales, decir que tratarían de “picar” a Cuauhtémoc Blanco, quien no participó en el primer juego, fue un grave error, ya que el “10” azteca fue de lo más destacado durante este partido. El Temo es un jugador al que le encanta que lo reten, que lo provoquen, porque así se crece más hasta llegar a convertirse en una verdadera amenaza para sus rivales. Ojalá le hubieran avisado a Don Rodrigo.
Todos los comentarios acerca del estado de la cancha, que si afectaría jugar en césped artificial, que si la pelota botaría mucho, todo eso quedó en el olvido cuando Giovani dos Santos al 45’logró adelantar en el marcador a los dirigidos por Javier Aguirre, quien se enfundó en una clamorosa celebración con el novio de la cantante y actriz, Belinda, según las revistas del corazón.
Los locales se fueron heridos al descanso, mientras que México se llevó la calma a los vestidores. El encuentro literalmente asemejó una pelea callejera con codazos, patadas, manotazos, si no, que le pregunten a Ricardo “Rocky” Osorio, quien fue agredido por Álvaro Saborio en una “disputa” aérea por la pelota, que dicho sea de paso, fue por lo que más sobresalió el delantero centroamericano.
Efraín Juárez y Giovani dos Santos, integrantes de la “generación dorada” que ganó el Mundial Sub-17 en Perú en 2005, enseñaron los atributos que los han llevado a ser parte del grupo de jugadores confiables de Aguirre, ya que también disputaron la Copa Oro en julio de este año.
Dos Santos anotó un gol y asistió en dos ocasiones, además, metió en serios aprietos a la defensa costarricense, a pesar de que el atacante del Tottenham Hotspur inglés estuvo un poco perdido en los primeros minutos del encuentro.
Juárez brindó el juego de su vida, parecía que estaba por toda la cancha, defendía cuando se le requería y ofendía en cuanto tenía la oportunidad, tan es así, que fue quién inició un contragolpe desde el área mexicana al conducir el balón hasta terreno rival para entregárselo a dos Santos para que la acción culminara en gol de Guillermo Franco al 52’, segundo de México.
De inicio fue raro no ver el nombre de Andrés Guardado entre los 11 que saltarían a la alfombra del Ricardo Saprissa, sin embargo, el tiempo le dio la razón al “Vasco” Aguirre, quien prefirió tener más presencia en el medio campo con los Castro (José Antonio e Israel) y Torrado.
El mediocampista del Deportivo La Coruña (Guardado) entró durante la parte complementaria. El “Principito” demostró que ha vuelto al nivel, y para muestra un botón, al encabezar otro contraataque hacía el marco tico el cual él mismo concretó al 70’ a pase de Dos Santos y dejar en la lona a los costarricenses, además, de causar que algunos asistentes abandonaran el estadio a falta de 20 minutos para el silbatazo final.
México ganó su primer partido de visitante, aunque siendo Costa Rica el rival, se debió pensar en ello seguramente, demostró personalidad, infundió preocupación en sus rivales, se ganó el respeto de quienes no confiaban en este equipo. Ahora, el panorama se vislumbra más claro que en la eliminatoria pasada, sólo se debe ganar los dos próximos encuentros en casa y la siguiente misión será buscar los boletos con destino a Sudáfrica.
Hoy la Selección amanece en el tercer lugar de la tabla con 12 puntos por debajo de Estados Unidos con 13, al igual que Honduras, sólo que los catrachos tienen mejor diferencia de goles, por lo que se ubican en la punta. Pero lo más gratificante es que la Selección ha recobrado la garra y la personalidad que los ha llevado a ser llamados “el gigante de Concacaf”.

El Negro Trani